Día 10 - Glyptotek, compras por Stroget y aeropuerto
Antes de ir de compras, decidimos que igual valdría la pena visitar Ny Carlsberg Glyptotek... y menos mal, es uno de los imprescindibles de Copenhague y de Dinamarca.
Hoy vamos sin prisas (en teoría) y nos levantamos tardísimo: a las 9 de la mañana.
Toca recoger todo y dejamos las mochilas preparadas para salir hacia el aeropuerto, aunque tenemos toda la mañana libre.
Mientras desayunamos tranquilamente, revisando nuestra planificación y recogiendo las últimas cosas, nos damos cuenta de que no hemos visitado algo que se se llama Glyptotek.
Habíamos leído que era algo relacionado con Carlsberg… Carlsberg, cerveza, algo que tendrá que ver con la cerveza… ¿un museo de la cerveza?… En nuestra guía de Dinamarca venía una foto de una escultura, así que nos tenía un poco despistados.
Lo teníamos anotado como curiosidad, más que como un sitio de interés (vaya metedura de pata si nos hubiéramos ido de Copenhague sin visitarlo)
Así que vamos hacia Stroget, y luego por Stroget en dirección al ayuntamiento y Tivoli.
Paramos en varias tiendas de ropa buscando camisetas ‘para turistas’, que incluyera algo de Dinamarca o de Copenhague, algún diseño vikingo o similar… Pero apenas encontramos ese tipo de camisetas, quitando las más básicas que estaban repetidas en varias tiendas…
Vimos muchas con el texto ‘Kobenhavn K’ y ‘KVH-K’ (en ese primer viaje no sabíamos qué era la famosa K, que hace referencia al centro histórico de Copenhague )
Bueno, pues vamos a ver qué es eso de Glyptotek…
Ny Carlsberg Glyptotek
Ya desde la fachada se ve que no va a ser un museo dedicado a la cerveza :)
Compramos las entradas (también están incluidas en la Copenhagen Card , así que planifica tu visita a Copenhague mejor de lo que lo hicimos nosotros)
El museo es alucinante…
No sólo por las colecciones que incluye, sino por el edificio en sí.
La zona que se conoce como Winter Garden, que es realmente una zona de paso y descanso, es de lo más inesperado y nos pareció precioso.
Claro, íbamos con cero expectativas sobre lo que encontraríamos allí, así que el museo en general nos dejó con la boca abierta.
Aquí tienes más información sobre el Ny Carlsberg Glyptotek y lo que puedes ver .
A mí me gustó sobre todo la colección de esculturas del antiguo Egipto.
Y toda la parte relacionada con las civilizaciones del Próximo Oriente.
También nos gustó mucho la colección de pintura francesa. Hay obras de Manet, Degas, Monet, Gauguin…
Había obras de mantenimiento o algún tipo de remodelación, y algunas salas estaban cerradas al público.
De todas formas, la experiencia fue increíble.
De verdad, aunque no te guste el arte… Creo que Ny Carlsberg Glyptotek es uno de los imprescindibles de Copenhague. No hace falta ser un entendido, ni mucho menos. Sólo por la parte histórica, las piezas de arte antiguo, podrías estar toda una mañana curioseando y viendo los detalles (al menos a mí, es la parte que más me gustó).
También pudimos subir a la azotea del edificio, desde donde hay unas vistas muy bonitas.
No podemos entretenernos mucho porque nos quedan todavía las compras para regalos y salir hacia el aeropuerto.
Decíamos que iba a ser un día sin prisas… :)
Al final, el tema ‘regalos’ quedó zanjado rápidamente: camisetas KVH-K para toda la familia, que cada uno buscase el significado…
Además, parece ser que sólo había talla ‘vikinga’: XL y XXL. Eso sí, les llevamos el ticket de devolución por hacer la gracia.
Aeropuerto y despedida
Volvemos al apartamento a por las mochilas.
¿Cómo es posible que pesen tanto? Llevamos de vuelta prácticamente lo mismo que traíamos, pero pesan como el doble.
Nos arrastramos hasta Kovenhavn H, la estación central, desde donde podemos coger transporte público hasta el aeropuerto.
Esta vez sí elegimos los tickets correctos (al menos eso creo).
Y para el camino compramos unos bombones con nuestras últimas coronas danesas: nos sobran 5 coronas.
En total, el trayecto son como unos 20 minutos. Llegamos con tiempo de sobra, no aparece todavía en las pantallas de información la puerta de embarque de nuestro vuelo.
Facturamos las mochilas y nos queda un rato de espera hasta la hora de embarque.
Así que decidimos comer en uno de los restaurantes. Pedimos pasta… Pero tarda, y tarda, y tarda… Y vemos que no nos va a dar tiempo.
Estamos en la Terminal C y nos aparece en pantalla que nuestro embarque es en la Terminal A.
Finalmente, aleluya, llega la pasta y la tenemos que engullir a toda máquina… Entre las prisas y el hambre no recuerdo ni de qué tipo era la pasta, ni la salsa, ni nada…
A todo correr hacia la terminal A, porque no sabíamos cuánto se tardaba en llegar.
Y de hecho, llegamos de los últimos (a la zona de espera), pero con tiempo de sobra para ir al baño. Estaba todo calculado :)
Diario de viaje
Desde el avión vemos como se aleja Copenhague…
…y nos despedimos con una lagrimilla, porque realmente había sido un viaje inolvidable.
Aquí tienes un poco el resumen de este viaje a Dinamarca, por si te puede servir de referencia , incluyendo las cosas que habríamos hecho de forma diferente, errores, consejos, etc.